viernes, 2 de noviembre de 2018

Relato sobre una fotografía - Cuento





RELATO SOBRE UNA FOTOGRAFÍA


Resultado de imagen para callejuelas de toledo españa





Tiempo después del fallecimiento de mi abuelo, con mi padre, nos dirigimos a la vieja casona donde supo vivir. Buscando mejores recuerdos en nuestras memorias, ingresamos a la “casa paterna”. Al llegar al salón, mis ojos no pudieron resistir el no mirar aquella pared llena de fotografías, algunas tan antiguas que podíamos ver al abuelo en brazos de su madre junto a su padre. Aquel muro era casi la historia gráfica de la familia. Muy niño recorría con mi abuelo las imágenes y una por una describía con palabras cada cuadro: el tío Pepe con la tía Dolores en la vieja casa de mis bisabuelos en Santiago de Compostela; la abuela Justa con sus padres, Gervasio y Anunciada, todos estaban allí, todos hasta nuestros días.
Aquellas imágenes  eran para mí conocidas. Bueno, todas no. Había una fotografía, la de un callejón (no sé dónde) que mi abuelo siempre salteaba y cuando yo lo interrogaba, nunca me contestó. Jamás una respuesta y preguntando a otros de la familia, nadie sabía qué era ni qué significaba. Pero si sabía que era muy apreciada por mi abuelo. Más de una vez, en últimos años, lo encontré frente al muro, solo, pensativo, mirando aquella fotografía.
Entramos a la “casa paterna”. El silencio cortó nuestros pensamientos. Al llegar, me fui directamente al muro de las fotografías. Sin esperar palabra alguna le dije a mi padre: -Las fotos me las llevo Yo; y mi padre consintió. Crecí con ellas y las quiero para que mis hijos también lo hagan. Es la historia familiar en imágenes.
Eran muchos cuadros y se me ocurrió conservar este tesoro armando álbumes. Poco a poco fui desarmándolos. Más de una foto registraba alguna anotación atrás: como fechas, o en qué circunstancia se tomó esa instantánea. Así  llegué a la fotografía del secreto mejor guardado. La descolgué y pensé en desecharla, pero pensando en el abuelo decidí tenerla. Comencé a desarmar el cuadro, le quité el marco y libre la foto, veo en su anverso una inscripción con una caligrafía perfecta: Calle donde a los quince años conocí el sexo y el amor, comencé a hacerme hombre y ella, mujer. Años después, formamos nuestra familia”.

                                 --------------------------------









No hay comentarios:

Publicar un comentario